Caso: Los
clientes de Ya Escribo Yo por Ti, en
este caso compraron un aparato de aire acondicionado, con bomba de calor, que
en verano funcionaba muy bien pero que llegado el invierno, cuando se
necesitaba que calentase, el cacharro aleatoriamente se negaba. El aparato fue
comprado en unos grandes almacenes y la duda de nuestros clientes, a la hora de
reclamar, fue decidir como hacerlo y si debían acogerse a la garantía del
fabricante o si por el contrario lo mejor sería utilizar la garantía del gran
almacén que lo había vendido. El equipo de Ya
Escribo Yo por Ti, aconsejó y redactó un escrito para que sus clientes
solicitasen, en primera instancia, el cambio de acondicionador de aire al
vendedor, dejando el uso de la garantía del fabricante como segunda carta en
caso de que la primera opción fallase.
Resultado: A
pesar de que el primer fallo de funcionamiento se produjo a los seis meses
desde la compra del aire acondicionado, el vendedor respondió, con su propia garantía,
e instó al fabricante a que cambiase el aparato. La segunda unidad continuaba
teniendo el mismo fallo y se volvió a negociar con el vendedor para que diesen
una solución, un tercer aparato persistió en no funcionar y nuevamente se
negoció con el vendedor. Esta vez la petición que se les realizaba era el
cambio de marca, Ya Escribo Yo por Ti
volvió a intervenir y consiguió un nuevo aire acondicionado de una marca
diferente; éste último, desde el primer día, funcionó perfectamente. El proceso
fue largo, duró casi dieciocho meses, pero al final nuestros clientes salvaron
su inversión y disfrutaron de una buena calefacción en invierno. Una nueva
muesca por el éxito obtenido, pasó a marcar el cuerpo de nuestra estilográfica.
Nota del equipo de Ya
Escribo Yo por Ti: Por hacer un símil sobre la rentabilidad en la bolsa,
éxitos pasados no garantizan éxitos futuros.
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